Las cartas de Guinea Bissau
En este mismo sentido, el tercer capítulo hace mención al uso del
dialogo como elemento del aprendizaje, ya que el hombre no se forma, ni se
concibe en el silencio, sino en la palabra, la acción y la reflexión, en otras
palabras el dialogo que se establece entre el educador y el educando,
porque como práctica de la libertad es indispensable el dialogo. Es importante
establecer el dialogo con el pueblo, pero para esto se necesita tener un
lenguaje similar a la de las costumbres del individuo, conocer e integrarse a
la vida cotidiana del hombre, investigar su leguaje, forma de pensar y
sus actividades, a través de esta educación, los elementos se conjugan para
generan conocimiento.
Es necesario tomar en consideración que
cuando se desee investigar el tema generador se debe acudir al lugar donde se
encuentren los individuos que se pretende liberar y averiguar el pensamiento de
ellos para de esta manera no descontextualizar su trabajo, por el contrario se
trata de conseguir que la enseñanza se entre en su propia realidad para evitar
que sea un acto mecánico. Cabe destacar, que la superación y liberación
del hombre no se logra con el consumir de ideas, más se trata de que el
individuo las construya y sobre todo que llegue a transformarlas mediante la
práctica y la comunicación. La investigación del tema generador implica
dos fases: uno cuando se acude al lugar de los hechos para conocer cuál es la
forma de pensar de los oprimidos y la otra es la aplicación del pensamiento en
el aprendizaje sistemático a través de la interacción grupal entre los mismos
individuos, de este modo la persona ira adquiriendo conciencia de su realidad.
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